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Proceso de Planificación. 6 Fases que recorrer en la búsqueda de nuestro éxito

Proceso de Planificación. 6 Fases que recorrer en la búsqueda de nuestro éxito

La consecución de los objetivos en cualquier ámbito para cualquiera de nosotros precisa que ineludiblemente nos pongamos a diseñar la estrategia más adecuada y precisa para lograrlo. De esto se trata precisamente la planificación.

En los primeros artículos de esta sección de la página web, os he venido adelantando tanto la definición como otros aspectos esenciales que rodean el concepto de Planificación y que vendría a resumirse, en el plano puramente deportivo, como el proceso mediante el cual el entrenador y su equipo técnico buscan y determinan las alternativas y vías de acción que con mayor probabilidad puedan conducir al éxito. Dicho en otras palabras, se trata de decidir anticipadamente qué se va a hacer, cómo y cuándo.
Es decir, pensar con antelación cómo vamos a distribuir las cargas de entrenamiento, respetando siempre los procesos de adaptación biológica.

El Proceso de Formación de un deportista supone la elaboración de un plan global y de numerosos planes parciales que deben coincidir con el/los objetivo/s final/es, para dejar libradas al azar la menor cantidad posible de variables que incidan directa o indirectamente en este proceso.
A continuación te describo brevemente los seis pasos generales básicos ideales y sus aristas particulares en los que yo creo y trabajo para realizar una correcta planificación 

Proceso de Planificación

Existen diferentes modelos a seguir para determinar cuales son los pasos fundamentales que el entrenador debe dominar, para permitirle adelantar correctamente el proceso de entrenamiento.

En este sentido, y tras mi propio estudio de toda la literatura existente al respecto y la experiencia acumulada con el paso de las temporadas, yo os propongo las siguientes fases sobre la disposición ordenada, sistemática y específica, de todos los diferentes componentes de la planificación (objetivos, medios, métodos, test y otros), teniendo en cuenta los principios del entrenamiento deportivo y todas las demás bases teóricas canalizadas hacia la consecución de las metas.

Las condiciones necesarias y los pasos a seguir para realizar una planificación son los siguientes:

  • Análisis previo de la situación.
  • Previsión y Definición de los objetivos.
  • Realización de un programa racional.
  • Determinación los medios de control.
  • Realización/Ejecución del plan y su ajuste.
  • Evaluación final del proceso.

F1) Fase de Análisis: Estudio Global Previo. CONOCER LO QUE TENEMOS

Para comenzar el Proceso de Planificación hagámoslo con una idea tan importante como esencial que será  tener pleno conocimiento  de los aspectos que se refieren o van a estar estrechamente relacionados con nuestro trabajo (características, idiosincrasia, debilidades y fortalezas…).

Localidad, club, instalaciones, horarios, directiva, historia, cultura, recursos materiales, deportistas y rivales, son la mayor parte de esos aspectos a analizar y que serán nuestro objetivo en esta primera fase de la planificación.

F1.1) En cuanto a la entidad
El Análisis consistirá en conocer, comprender y asumir la historia y el entorno cultural-deportivo del club para, partiendo de estas connotaciones culturales, identificar una filosofía que permita el continuismo o no de esos valores establecidos, “una forma de hacer” en todos los estamentos del club.

Deportivamente hablando, esta personal filosofía es importante y va a ser la base de nuestra contratación por parte de la entidad deportiva que nos ven como adecuados para asumir las riendas del equipo, por lo que nuestra adaptación es algo en lo que deberemos trabajar desde la firma del contrato y lograr satisfacer las expectativas que se han generado con nuestra incorporación.

Indagaremos para conocer su nivel de rendimiento de las últimas temporadas, en especial en la temporada anterior, su nivel de entrenamiento alcanzado y su perfil condicional, así como también analizar los recursos con los que disponemos para llevar a cabo los entrenamientos. Es decir: tenemos que saber con precisión dónde estamos trabajando.

Los Objetivos del Club estarán siempre por encima de los objetivos del equipo, y a fin de saber diseñar el camino será clave que esos objetivos finales sean concisos y claros, y que servirán posiblemente para saber si somos acreedores a la renovación o en el lado contrario, posibl

Análisis DAFO del Club: Relación Entorno-Interno:
El Análisis DAFO (las siglas que corresponden al acrónimo de Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) del club es una herramienta de dirección estratégica y esencial para llevar a cabo una correcta gestión.

Es sencillo de realizar pues tan solo no hace falta una hoja de papel y algo de tiempo y debe adaptarse en cada momento puesto que las circunstancias son cambiantes.

El método DAFO de análisis se aplica de manera habitual como herramienta de autoconocimiento personal, puesto que los individuos también tenemos factores positivos y negativos tanto internos como externos que hacen que el método, no solo sea de aplicación, sino que es una magnífica herramienta para conocernos un poco mejor.

Antes de tomar las decisiones estratégicas que consideremos oportunas en la búsqueda de la consecución de objetivos establecidos, debemos haber hecho el trabajo previo de analizar al club desde la perspectiva de intentar identificar aquellos aspectos positivos, reforzando aquellos que nos hacen más fuertes y competitivos y aquellos aspectos negativos, con la idea de minimizarlos mediante la toma de decisiones estratégicas.
Tanto los aspectos positivos como los negativos pueden analizarse desde un punto de vista del propio club, aspectos internos, como del entorno.

Análisis interno. Debilidades y Fortalezas de un proyecto deportivo:
Se trata de detectar tanto las fortalezas como las debilidades del club para el que trabajamos.
Análisis externo. Amenazas y Oportunidades: Se trata de detectar las oportunidades y las amenazas de nuestro entorno.

F1.2) En cuanto al deportista
Aquí tendremos que hacer una distinción entre Plantilla (grupo de jugadores/as) y Jugadores/as (individual).

A) Plantilla. Análisis colectivo:

  • Tipología. Confección de la plantilla para lograr unos objetivos (jugadores para un modelo de juego), ó según la plantilla de la que dispongamos, establecer objetivos (diseñar modelo de juego para este grupo).
  • Número de Jugadores/as
  • Desarrollo evolutivo 
  • Nivel Deportivo
  • Rendimiento de los años anteriores

B) Jugadores/as. Análisis individual:

  1. Perfil Duro:
    – Características físicas
    – Características técnicas
    – Características tácticas
  2. Perfil Blando:
    – Personalidad
    – Habilidades sociales
    – Contexto Familiar
    – Nivel de compromiso 
    – Trayectoria deportiva
    – Palmarés
    – Historial médico

Análisis DAFO del Equipo: 
Este Análisis DAFO sobre el Equipo que vamos a dirigir, podemos realizar un diagnóstico del equipo ante decisiones inmediatas que tenemos que llevar a cabo. Con este método podemos analizar el contexto actual del equipo desde dos puntos de vista (interno y externo), para resolver un problema.

En el voleibol y como ocurre en el resto de disciplinas deportivos, los objetivos prioritarios suelen estar orientados a resultados y  podemos realizarlos conjuntamente con los jugadores a corto o largo plazo.

Dentro del análisis interno, que consiste en detectar fortalezas y debilidades de nuestro equipo que dependen directamente de nosotros, encontramos:

  • Debilidades: En este apartado anotamos los puntos débiles que limitan la capacidad de nuestro equipo contra cualquier rival y que debemos de tener en cuenta para controlarlas o superarlas.
  • Fortalezas: En este grupo enumeramos todas las capacidades, recursos y ventajas competitivas que puede tener nuestro equipo para después convertirlas en oportunidades.

En el análisis externo, identificaremos las oportunidades y amenazas de nuestro equipo con respecto a otros y dentro del entorno competitivo en el que nos relacionamos.
Estas no dependen directamente de nosotros.

  • Amenazas: Se trata de aspectos globales que nos van a dificultar llegar a conseguir nuestros objetivos.
  • Oportunidades: Son aquellas que nos ofrece el entorno y que debemos de aprovechar con respecto a otros rivales.

F1.3) Recursos
Vamos a definir 3 tipos de Recursos con los que debemos de contar para el trabajo y los cuales debemos tener bien definidos, conocidos y controlados para sacarles el máximo rendimiento posible a cada uno de ellos.

A) Recursos Humanos

  • Junta Directiva y Organigrama: Aunque parezca algo poco trascendental, creedme que a la larga es crucial saber identificar a las personas que forman parte de la estructura jerárquica del club para saber a quien consultar o acudir según que acontecimiento esté sucediendo.
    Por lo general, la cadena directiva tendrá sus propios filtros a los que tendremos que recurrir según necesidades, y en este caso las personas con más cercanía al día a día del equipo y del staff técnico será el delegado del equipo ó manager, coordinador o supervisor del programa deportivo del club y/ó el gerente general.
  • Staff Técnico: Si hablamos de la teoría, lo ideal sería contar con uno o dos asistentes, un preparador físico, un estadístico, un psicólogo deportivo y un nutricionista.
    La realidad nos dice que esto solo se da en los equipos top o selecciones nacionales, y nosotros tendremos que hacer todo ese trabajo en muchos casos, o en los regulares contar con una persona en la que delegar alguna de las funciones.
    Cómo consejo, si no tenéis la posibilidad de tener un staff amplio y sois afortunados, cuando menos, de contar con alguien que trabaje con vosotros, conocedlo bien, sabed trabajar juntos y que la confianza sea lo mas importante entre ambos, muy por encima de los roles o status.
  • Personal Médico: No creáis que me he olvidado de los encargados médicos del equipo, empezando por el fisioterapeuta y siguiendo con los doctores que estén pendientes del estado físico de nuestros/as jugadores/as. 

B) Recursos Materiales

  • Prioritarios:
    Instalaciones deportivas (entrenamiento físico): Canchas de voleibol (principal y posibles por división de la principal), gimnasio, sala de uso/guardado del material, todo el material que vayamos a emplear (número de balones, carros para balones, redes, elementos de precisión…)
    Salas para uso Audiovisual: Reuniones, vídeo, charlas…
  • Secundarios:
    – Piscina, pista de atletismo, 
  • Otros importantes:
    – Socios del club
    – Fans
    – Sponsors
    – Familiares
    – Agentes/Representantes

Y una vez que hemos realizado el Estudio Previo a través del uso de la matriz DAFO (Debilidad, Amenaza, Fortalezas y Oportunidades) y tenemos una gran cantidad de información, es el momento del diseño de las Estrategias y darle uso a todos esos datos.

Para dicho diseño nos podemos servir  del análisis CAME, que es una herramienta para decidir las acciones futuras necesarias para corregir y mantener la situación interna inicial, a su vez que debemos afrontar y explorar el contexto, el mercado (análisis externo).

A través de esta matriz CAME, podremos:

  • Corregir las debilidades. 
  • Afrontar las amenazas.
  • Mantener las fortalezas.
  • Explotar nuevas oportunidades. 

Los beneficios de la implementación de esta matriz CAME son los siguientes:

  1. Enfoque ajustado. El análisis CAME pone a todos los miembros de la empresa o negocio en la misma página para que todos pongan sus esfuerzos en lo más importante..
  2. Alineación estratégica. Con todos trabajando en los mismos objetivos, los gerentes y empleados, pueden construir mejores estrategias juntos.
  3. Identificar aspectos desconocidos. Es probable que se descubran aspectos de la empresa o negocio que no se conocían. Desde fortalezas desconocidas hasta amenazas ocultas..

F2) Fase de Definición de Objetivos

La estructuración de un plan de entrenamiento se basa en la definición del objetivo, de este depende el establecimiento de contenidos, medios, métodos, recursos y participaciones entre otros, que requiere el deportista para obtener los resultados establecidos.

En términos generales el objetivo se pueden definir como la conducta, logro y comportamiento que esperamos obtener de un deportista o equipo posterior a su participación en el proceso del entrenamiento deportivo, y debe tener claridad de formulación, ser específico, medible, coherente, alcanzable y coherente con la realidad.

Medible
Todo objetivo que se proponga deberá ser evaluado para comprobar en qué porcentaje se cumple. Ésta medida puede ser tanto cualitativa como cuantitativa, de acuerdo con las características del objetivo. 

Alcanzable
Los objetivos que se propongan deben ser reales y coherentes con el tiempo con el que se cuenta para alcanzarlos.

Visible
La visibilidad de un objetivo hace referencia a que éste debe ser percibido por el deportista, el equipo, el entrenador y el grupo técnico. Por ejemplo, si el objetivo de la sesión de entrenamiento está enfocado en la mejora de la eficiencia del trabajo en equipo, al finalizar la sesión se debe percibir que en efecto, ésta ha evolucionado a través de la definición de tareas individuales encaminadas a la compenetración del trabajo en equipo.

Específico
Para que un objetivo sea realmente eficiente debe ser concreto, claro y apuntar a lo que se quiere lograr. De esta forma, se trazarán los derroteros para alcanzarlo. 
Además de las anteriores características de un objetivo bien formulado, éste debe socializarse con los deportistas, para que entiendan la necesidad de comprometerse con la realización del plan, el cuerpo técnico, el trabajo en equipo, encaminando los esfuerzos hacia una sola dirección (con la vinculación activa de los padres de familia y de los dirigentes).
Lo anterior permitirá identificar y reconocer que la victoria no se resume en los resultados de la competencia, sino en la evolución del proceso del deportista.

Para poder definir adecuadamente un objetivo, el entrenador deberá considerar los siguientes aspectos:

  • Análisis de las características del deportista, de acuerdo con lo establecido en el primer paso (analizo lo que tengo).
  • Entorno del deportista (deportivo, familiar, social y otros), en el cual se llevará a cabo el proceso del entrenamiento deportivo.
  • Características propias de la disciplina (deportes individuales, deportes de conjunto, otros).
  • Eventos en los que se espera participar.

Clasificación de los Objetivos
En el entrenamiento deportivo los objetivos se pueden clasificar desde varias perspectivas (físicas, técnicas, tácticas, cognitivas y otras), pero todas deben estar encaminadas hacia el mejoramiento de los resultados del deportista; para ello, a continuación se presenta una clasificación de los objetivos:

A) OBJETIVOS INTERMEDIOS
Se enmarcan aqui aquellos objetivos que se puedan alcanzar en corto y mediano plazo, atendiendo a los principios básicos y pedagógicos del entrenamiento. Estos objetivos a su vez se podrán dividir, según Grosser (1992), en:

  1. Objetivos Operativos: 
    – Dentro del equipo, son aquellos relacionados con aspectos del entrenamiento, estilo de juego, habilidades técnico-tácticas y capacidad condicional. 
    Ej: 3.3.30
    – Individualmente, Rol del jugador dentro del equipo. Adquisición de responsabilidades.
    Ej: Para el opuesto del equipo: Eficacia entre el 45% y 55%
  2. Objetivos Parciales:
    – Se logran a través del encadenamiento metodológico de varios ejercicios, ya sea en una sesión, un microciclo o un mesociclo.
    – Ejemplo: Cerrar el bloqueo.

A su vez, estos Objetivos Intermedios se clasifican teniendo en cuenta la capacidad de rendimiento en la cual queremos incidir.

  1. Objetivos Psicomotores: 
    – Hacen referencia al aprendizaje y desarrollo de las diferentes capacidades físicas.
    – Ejemplo: la fuerza, la velocidad, la diferenciación y el equilibrio, entre otras.
  2. Objetivos Cognitivos:
    – Se refiere a todos los conocimientos que se pueden desarrollar a través del proceso de entrenamiento, los de orden táctico.
    – Ejemplo: en fútbol el manejo espacial dentro de un esquema táctico planteado.
  3. Objetivos Psicológicos:
    – Estos se enfocan al desarrollo actitudinal y comportamental del deportista, ligado al desempeño deportivo.
    – Ejemplo: manejo de la ansiedad antes del encuentro

B) OBJETIVOS FINALES
Al enmarcar los objetivos finales del entrenamiento, se habla de aquellos destinados a la terminación de una temporada. Es decir, el producto final del entrenamiento, enmarcado por la consecución del resultado deportivo. También se le conoce con el nombre de objetivos globales o superiores de acuerdo con lo expuesto por Grosser (1992).

Estos objetivos Finales también pueden ser conocidos como OBJETIVOS SUPERIORES, definidos como el resultado final que se espera alcanzar después de realizar el proceso de entrenamiento.
Por ejemplo, un objetivo final podría ser el terminar la temporada manteniendo la categoría máxima (permanencia).

Es decir que durante la planificación se deben establecer objetivos intermedios que orienten el desarrollo de las sesiones, microciclos, mesociclos y etapas, de igual manera, se formularán objetivos finales para el macrociclo

F3) Fase de calendario de competiciones y Periodización

Se refiere a la selección de aquellos eventos competitivos en los que se espera participar durante una temporada, consensuado con la dirección deportiva del club, y que permitirá organizar y periodizar los diferentes momentos del proceso del entrenamiento.
Los eventos apropiados para los niveles de perfeccionamiento y altos logros se encuentran asociados principalmente a la participación en diferentes tipos de competiciones, las cuales se clasifican en primarias, secundarias e complementarias.

  1. Competiciones Primarias:
    – Son las competencias más importantes de la temporada, para las que se ha estructurado y desarrollado el plan de entrenamiento.
    – Por ejemplo, Liga, competiciones continentales
  2. Competiciones Secundarias:
    – Son las que no tienen el mismo grado de importancia que las primarias, por lo cual el deportista no se encuentra en su máxima forma deportiva. Este tipo de competencias sirve como preparación
    para las competencias primarias.
    – Por ejemplo, Copa.
  3. Competiciones Complementarias:
    – Este tipo de pruebas son las que aparecen durante el ciclo de entrenamiento y que no se encuentran contempladas en la estructura de planificación, pero que el deportista asume debido a factores externos como compromisos con los patrocinadores, intereses económicos, entre otros.
    – Por ejemplo, torneos de pretemporada o dentro del período de transición.

PERÍODO DE COMPETICIÓN
Todos los deportes poseen una estructura de organización de competencias principales a lo largo de la temporada.
A esta forma de organización se le conoce con el nombre de períodos de competición. En general existen dos tipos de períodos de competencia, los competitivos largos y los competitivos cortos, siendo el primero de estos, período competitivo largo,  el más habitual dentro del panorama europeo, en el que los clubes tienen un período competitivo de unos 7-8 meses.
El entrenador debe tener un conocimiento amplio de todos los aspectos relacionados con estos períodos competitivos largos, para lo cual deberá tener respuesta a la siguiente pregunta y aspecto:

  • ¿Cómo se organiza la competición?. Liga regular, play off, eliminatoria
  • Formato de competición Ida y vuelta, partido único, 3-5 partidos..
  • Frecuencia de competición
  • Rivales
  • ¿Dónde se compite?
  • Horarios
  • Otros

Aunque si suele hacerse una previsión de cuales van a ser los momentos más importantes de la temporada, el transcurso de la competición nos irá modificando o ratificando dicha previsión a través de la información que se desprenda de los encuentros que se hayan disputado.
En cuanto a esto, y sobre los rivales en competición podríamos tener en cuenta lo siguiente:

  • Equipos contra los que se puede perder por su potencial
  • Equipos de nuestro nivel
  • Equipos contra los que no debemos perder

Los períodos competitivos cortos son aquellos en los cuales la competición se condensa en un momento único de la temporada, realizándose en una semana o incluso en un sólo día. 
Para participar en estos períodos de competencia, el entrenador deberá saber cómo se compite para poder orientar el entrenamiento, y para ello existen dos tipos de formas de competición, por clasificación y por encuentro directo.

  • Por clasificación
    – Son aquellos deportes en los que se debe ir avanzando a la final mediante diferentes rondas eliminatorias (series). 
    – Fase de grupos y eliminatorias a ida y vuelta.
  • Por encuentro directo
    – Son los deportes en los que la confrontación deportiva es única y dependerá de un solo evento

PERIODIZACIÓN
Una vez determinado el calendario, la organización de la competencia y los objetivos, se determina el tiempo disponible y se divide en las diferentes etapas del proceso del entrenamiento deportivo, considerando los siguientes factores:

La división del plan anual de entrenamiento (Tiempo) se debe realizar en partes individuales llamadas Fases de Entrenamiento y vamos a encontrar cuatro:  sesión, microciclo, mesociclo y macrociclo, que se rigen por principios claros y que se presentarán más adelante.

Esta periodización estará condicionada por la competición por lo que ha de contar con un carácter abierto y flexible para posibles y necesarias adaptaciones a las novedades que acontezcan.
En este sentido, debe contener métodos de evaluación y control con los que podamos, como entrenadores, valorar el proceso de entrenamiento que se está llevando a cabo.

Cómo os he comentado, es tal la importancia de la Periodización que le dedicaremos un apartado especial en esta sección de la web para estudiar tipos, características, ejemplos…

F4) Fase de Programación. Medios de Entrenamiento y Distribución de Cargas

El entrenamiento deportivo es un proceso pedagógico destinado a estimular los procesos fisiológicos del organismo, favoreciendo el desarrollo de las diferentes capacidades y cualidades físicas. Su objetivo es promover y consolidar el rendimiento deportivo.

Debe planificarse desde el principio hasta el final para conseguir alcanzar los objetivos en cada fase y para cada capacidad física. Es un proceso complejo pues los efectos del entrenamiento no son ni inmediatos ni duraderos.

Los Medios de Entrenamiento son ejercicios o actividades que podemos realizar en la sesión de entrenamiento para alcanzar los objetivos. Su distribución más lógica se orienta en la estructura del ejercicio en relación al gesto técnico, Fritz Zintl (1991).

Somos los entrenadores quienes debemos seleccionar los medios ó ejercicios de entrenamiento que consideremos más útiles y eficaces para lograr los objetivos propuestos y que puedan ofrecer los mejores resultados de acuerdo con las condiciones y capacidades de nuestros deportistas, rechazando aquellos que puedan ser superfluos o perjudicial para las características de nuestros jugadores de voleibol .
En rasgos generales existen medios variados y medios específicos. A su vez, ambos pueden ser de orientación general y de orientación selectiva. 

A continuación se presenta una propuesta para relacionar los medios con los niveles de iniciación y perfeccionamiento:

  • Nivel de iniciación
    En los niveles de iniciación, y sobre todo en las edades tempranas donde el inicio del entrenamiento debe hacerse con gran variedad de medios para evitar la monotonía y cultivar un gran repertorio motor, se hace necesario ajustar los ejercicios empleados y canalizarlos hacia la consecución de objetivos concretos.
  • Niveles de perfeccionamiento y alto rendimiento
    La variedad de estímulos disminuye en estos niveles a medida que se va incrementando el grado de especificidad de cada uno de los ejercicios, orientándose cada vez más a las situaciones de la competencia

CLASIFICACIÓN DE LOS MEDIOS DE ENTRENAMIENTO
Cómo os he comentado un poco mas arriba, los medios de entrenamiento son los tipos de ejercicios y actividades que podemos realizar en nuestro entrenamiento y podemos pensar en estos como las herramientas que tenemos a nuestra disposición, y que se realizan de manera sistemática y dosificada.

Existen diferentes formas de clasificar los medios de entrenamiento. Atendiendo a las clasificaciones dadas por Harre (1987) y Matveiev (1977), podríamos decir que estos se clasifican en generales, especiales y competitivos.

  1. Ejercicios Generales: Se pueden definir como los ejercicios que en su ejecución no contienen fases y/o partes técnicas de la especialidad deportiva seleccionada y están encaminadas a lo inespecífico. Estos ejercicios aseguran el desarrollo general del organismo, Platonov (1995), son ejercicios diferentes a los realizados durante el gesto técnico, pero que permiten asegurar el desarrollo básico de los sistemas orgánicos del cuerpo, que a su vez son divididos de acuerdo con lo expuesto por Colli (1988), en no orientados y orientados.
    – No orientados: Buscan desarrollar las capacidades motoras generales. Se utilizan para la recuperación psicofísica del atleta en todos los períodos; ya sea de preparación, de competición o de transición.
    Por ejemplo: trotar para resistencia, correr para velocidad, levantar pesa para fuerza etc..
    Orientados: Son aquellos que desarrollan capacidades físicas especiales y concretas del deporte, Por ejemplo: saltos del atacante de vóley, para potencia de piernas.
  2. Ejercicios Específicos: Son ejercicios similares al gesto técnico y con acciones afines a las de la competición, y contienen en su ejecución partes o fases técnicas de la especialidad deportiva seleccionada y encaminadas a praxis motriz especial.
    Se subdividen en dos según Matveiev (1977): ejercicios de aprendizaje y ejercicios de desarrollo.
    De Aprendizaje: También conocidos como de iniciación, y están orientados al aprendizaje y automatización de la forma y la técnica de los gestos del deporte.
    De Desarrollo ó de Naturaleza Condicionante: es donde tratamos de hacer ejercicios físicos- técnicos.
  3. Ejercicios Competitivos: Son aquellos que se ejecutan dentro del juego, los cuales están reglamentados tienen una relación técnico-táctico en enseñanza y perfeccionamiento de esas habilidades. Se subdividen en dos:
    – De Simulación: Son ejercicios y/ó partidos que no implican puntuaciones para campeonatos o encuentros de menor relevancia, en los cuales se busca el desarrollo de condiciones tácticas y condicionales específicas.
    Tienen un aspecto táctico-estratégico, ejercicios de algunas rotaciones para el K1, sistema defensivo y coordinación para la transición.
    – De Competición: La competencia en sí permite reconocer y ajustar aquellos medios que el deportista requiere, para mejorar sus desempeños futuros.

Otra forma de clasificar los Medios de Entrenamiento es la que ofrece Álvaro J. (2002), por la cual podemos ver dos tipos, Medios Específicos de la especialidad deportiva correspondiente y Medios Complementarios.

  1. Medios Específicos: encontramos todos aquellos directamente relacionados con las condiciones de competición y con los reglamentos en vigencia en los eventos en los que participarán.
    Su propósito es simular en la medida de lo posible las condiciones de competición y su importancia relativa con respecto a los ejercicios de preparación general y específica aumenta conforme se aproxima una competición.
    – Táctica Individual
    – Trabajo en Grupo con Desigualdad Numérica
    – Partidos de Entrenamiento
    – Competición
  2. Medios Complementarios: Su propósito es garantizar el desarrollo armonioso del organismo y proporcionar una base funcional que sirva de soporte a un buen resultado.
    Deben estar presentes durante toda la temporada de entrenamiento y permiten aumentar la capacidad de trabajo, mejorar la velocidad de recuperación, desarrollar los grupos musculares que no tienen una participación muy activa en la modalidad deportiva del atleta y proporcionar una influencia recreativa que evite fenómenos de saturación.

 

CONTROL DE LA CARGA DE ENTRENAMIENTO
De forma simplificada, entendemos el entrenamiento como un proceso en el que el deportista es sometido a una serie de estímulos conocidos y planificados (cargas) que provocan en él/ella una fatiga controlada que, tras los suficientes y adecuados procesos de recuperación, conllevan una mejora del rendimiento deportivo específico para cada disciplina deportiva (García et al., 1996).

Y la carga de entrenamiento se explica como la cantidad de efectos que tiene el esfuerzo realizado sobre el estado funcional del deportista(Zintl, 1991). Estas cargas, o mejor dicho, sus efectos, provocan cambios a nivel celular que están relacionados con la síntesis de proteínas estructurales y con el aumento de las enzimas que catalizan las vías metabólicas más importantes (Viru & Viru, 2003). De estas definiciones se desprende una tercera, más integradora, que considera que la carga que soportan los jugadores, ya sea en un entrenamiento o durante una competición, es el “conjunto de exigencias psicológicas y biológicas (carga interna o real) provocadas por las actividades de entrenamiento [o competición] (carga externa o propuesta)”(González-Badillo & Ribas, 2002) 

Ésta es una parte fundamental en la planificación del entrenamiento deportivo, donde el conocimiento y la experiencia del entrenador se exigen al máximo.
En esta etapa el entrenador debe sacar punta fina al lápiz, y tendrá que distribuir las cargas específicas del entrenamiento que llevarán al deportista a superarse día a día, siempre y cuando respete los procesos de adaptación, teniendo en cuenta las cinco cualidades de toda carga: volumen, intensidad, duración, densidad y recuperación.
Cada carga se establecerá para desarrollar una capacidad específica en el deportista, por lo tanto, ésta se debe distribuir e interconectar para cada una de las sesiones de entrenamiento.
Para ello se deben considerar los siguientes aspectos:

  1. Determinar cuáles son las capacidades físicas más importantes para lograr el objetivo planteado en su deporte. Clasificarlas en orden de importancia.
  2. Clasifica otras capacidades físicas que son importantes en un segundo nivel.
  3. Pregúntate cuál es el tiempo óptimo que requieres para el desarrollo de cada una de las capacidades principales.

Al igual que ocurre con la Periodización, el asunto del Control de la Carga de Entrenamiento es muy importante por lo que lo voy a tratar en un post complementario donde también trataremos “Los Principios del Entrenamiento” en los que nos basamos para la mejora de la condición y capacidad física de cada uno de nuestros jugadores.
Sin su conocimiento, no podremos diseñar un programa básico de entrenamiento deportivo ni seguirlo de manera eficiente.

F5) Fase de la Realización del Plan. Puesta en Marcha

Cualquier proceso de planificación no puede ser entendido como tal si este no es desarrollado. El proyecto no deja de ser un planteamiento teórico necesario, pero incompleto dentro de una plantificación

El realismo de la programación quedará de manifiesto en el momento de su desarrollo sin que por ello consideremos como imprescindible la FLEXIBILIDAD del mismo.
El gran número de variables que existen en el desarrollo de una planificación hacen que esta no siempre pueda ser cumplida al 100% sin que por ello se consideren erróneos los planteamientos de partida sobre los que se sustenta la planificación.

Aún así, la ejecución del mismo debe aproximarse al máximo a lo previsto en el plan inicial, aunque todos sabemos, entendemos y aceptamos que en la realidad son muchos los imprevistos que pueden interferir en su realización.
Si nos apartamos demasiado de lo previsto de antemano, corremos el riesgo de no poder cumplir con aquello que nos habíamos fijado, lo que debe ser algo que siempre debemos evitar si las circunstancias nos lo permiten.

Ya seleccionada la forma en la que se va a distribuir la carga se procede a ubicarla dentro de cada uno de los períodos, procurando su correcta interconexión y ubicando los momentos en los que el deportista adquiere su mejor forma, de tal manera, que coincida con el calendario de competencias, además de ubicar en puntos clave los respectivos controles, todo lo anterior, basándose en los objetivos finales.

Una vez se tiene esta visión general de la planificación, el entrenador se debe centrar en la organización de unidades más pequeñas (mesociclos), procurando entender cuáles son las adaptaciones que se requieren en cada uno de ellos, tomando como referente los objetivos propuestos, para dichos períodos de tiempo.

Realizado lo anterior, el entrenador deberá iniciar la planificación de los microciclos, los cuales estarán desglosados sesión por sesión, cada una con un objetivo específico, orientado a la consecución de los objetivos más generales (superiores).

F6. Fases de Evaluación y Retroalimentación

La evaluación: aun en el caso de que se logre una alta realización de los planes previstos, ésta quedará incompleta si no se realiza una periódica evaluación del proceso que nos permita corregir defectos o asegurarnos de la eficacia del mismo, por lo cual, se hace necesario el continuo control del efecto que produce la carga del entrenamiento en el deportista, de ahí que la evaluación se hace indispensable.

El principal objetivo de la evaluación es comparar los resultados que logró obtener el deportista con los objetivos que se habían planteado, para ello se programa en diferentes eventos denominados controles o test.
Las normas establecidas para garantizar la buena selección y aplicación de test son las siguientes:

  • Ser Sistemática: Estar ordenada en el tiempo y ser parte del proceso de entrenamiento
  • Estar planificada: Se debe planificar desde el principio; cuándo se ejecutará, cómo, dónde, cómo se analizará.
  • Ser individual: Se deben tener en cuenta las características del deporte y del deportista.
  • Ser de calidad: Debe arrojar datos reales y relevantes.

Según Vasconcelos (2000), los criterios que se deben tener en cuenta a la hora de seleccionar un test son:

  • Validez. Lo registrado corresponde con lo que se quiera medir.
  • Fiabilidad. Grado de precisión de la medida.
  • Objetividad. Grado de independencia de los resultados con respecto al evaluador.
  • Economía. Se debe realizar en poco tiempo, no requerir de instrumentación costosa, se debe aplicar a grandes grupos y los resultados deben ser fáciles de procesar.
  • Estandarización. Debe ofrecer valores de referencia para su comparación

Esta evaluación la podemos realizar de cinco formas:

  1. El control de las cargas de entrenamiento realizado: Un correcto control del entrenamiento obliga a un minucioso seguimiento del trabajo que se va realizando en cada sesión de entrenamiento bien por parte del entrenador o bien por parte del propio deportista. En este aspecto entendemos que los cuadernos individuales de entrenamiento son un interesante instrumento de trabajo durante el proceso de entrenamiento.
    Las notas de control de entrenamiento deberán cumplir los siguientes requisitos:
    – Abarcar varias sesiones de entrenamiento.
    – Incluir el entrenamiento previsto. 
    – Incluir el entrenamiento realizado.
    – Señalar las incidencias.

  2. Control de la técnica individual: Existen, según Godik (citado por Vasconcelos Raposo 2000), dos formas de medir la técnica; una forma visual y otra instrumental. La forma visual se realiza de forma directa por el entrenador o a través del análisis de video.
    La forma instrumental se realiza por análisis biomecánicos.
    El diario de campo será fundamental a la hora de evaluar el proceso de entrenamiento del deportista, pues nos puede arrojar gran número de datos que al ser analizados por el entrenador, darán luces acerca del estado del proceso de entrenamiento.
  3. El control del modelo de competición: en todas las modalidades deportivas existen planillas de observación, las cuales permiten cuantificar el comportamiento del deportista y/o el equipo durante el desarrollo de la competición específica.
    Dentro del campo de la actividad física y el deporte, la praxeología denomina a las planillas de control utilizados con este objetivo como ludogramas y praxiogramas.
    Este modelo descriptivo de analizar la actividad físico-deportiva permite una adecuada comprensión de cada deporte, no desde una perspectiva mecanicista, sino intentando hacerlo desde un enfoque del comportamiento motriz del que lo ejecuta.

  4. El control de la evolución de la capacidad de rendimiento: se realiza mediante la aplicación de los correspondientes test, de campo o laboratorio, preferentemente específicos, para cada modalidad deportiva o etapa del proceso de entrenamiento. Estos test debe cumplir las condiciones de validez, fiabilidad y objetividad necesaria para cumplir las funciones que a priori se le consideren.

  5. La evaluación final del proceso de intervención: Esta parte del proceso de entrenamiento, aun siendo una de las más importantes dentro de una perfecta optimización del proceso de preparación de los deportistas que pretenden alcanzar alto rendimiento deportivo normalmente es una las más olvidadas por parte de los responsables de su elaboración.

 

 

Reflexión importante

Finalmente quiero aclarar que el principio número uno de toda planificación es la flexibilidad. Siempre 

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